1.- Tome fotos de su vehículo, del contrario, y de todos los detalles del siniestro, incluso de su ropa o del estado de la vía.
2.- Anote los datos personales, tanto de todos los implicados como de las personas que se hallen en el lugar, a fin de poder llamarles, si fuera preciso, como testigos.
3.- Llame al cuerpo de policía correspondiente para que tome nota de todo lo sucedido.
4.- Por muy leves que parezcan las lesiones, acuda inmediatamente a un médico que le efectúe un examen exhaustivo, ya que las molestias pueden agravarse con posterioridad.
5.- Comunique el accidente a su compañía aseguradora, dentro de los siete días siguientes.
6.- Guarde todos los documentos que tengan relación con el siniestro (partes o pruebas médicas, facturas de farmacia, de transporte, presupuestos de reparación…).
7.- Recuerde toda la información posible de todo lo acaecido, y dado que en caso de tener que acudir a la vía judicial para cobrar su indemnización los procedimientos suelen ser largos, apunte todo lo que considere relevante sobre el accidente.
8.- Si ha sufrido lesiones tiene seis meses para interponer una denuncia ante el Juzgado, y si los daños han sido materiales dispondrá de un año para presentar la oportuna demanda.
9.- Desde un primer momento debe decidir si sus intereses serán defendidos por la propia compañía aseguradora o por un abogado ajeno a la misma. Si usted tiene un seguro de defensa jurídica, pueden salirle gratis los honorarios del profesional que designe. Hoy en día la mayoría de las pólizas de seguros de vehículos a motor contienen esta cobertura, por lo que su compañía aseguradora será quien pague a su abogado y otros profesionales (procuradores, peritos…) hasta el límite económico del contrato.
10.- Nunca acepte una indemnización de daños y perjuicios, ni firme documento alguno de hallarse saldado y finiquitado por cuantos conceptos pudieran corresponderle con ocasión de accidente, sin habernos consultado.
María Romero Valiña
MRV Abogados